En 1975, aprovechando la debilidad del gobierno franquista, el rey Hasán II de Marruecos organizó la llamada Marcha Verde (movimiento de 350.000 marroquíes organizado para ocupar el Sáhara español) y la dirigió hacia las fronteras saharauis, que se hallaban bajo la administración española. El régimen de Franco, debilitado por la enfermedad del dictador, optó por retirarse y ceder el territorio a Hasán II.
Años antes, fue surgiendo un movimiento para la liberación saharaui que se plasmó en 1973 en la creación del Frente Polisario. Desde entonces, cientos de activistas agrupados en dicha organización luchan por la convocatoria de un referéndum en el territorio del Sáhara Occidental en el que sean los saharauis quienes decidan sobre su futuro.
Uno de esos imprescindibles activistas es Hassana Eluali, miembro de la asociación saharaui contra la tortura. El Estado marroquí lo mantenía encarcelado desde 2012, cumpliendo una condena de tres años por su participación en unas manifestaciones. La falta de asistencia médica y el maltrato sufrido en la prisión le condujo a la muerte el pasado 29 de septiembre.
Al igual que Hassana Eluali, son muchos los presos políticos saharauis que sufren una brutal represión por parte de las autoridades imperialistas de Marruecos. Desde Izquierda Unida-Verdes de Águilas denunciamos esta situación y mostramos una vez más nuestro apoyo al pueblo saharaui en su legítima reivindicación.
Ayer, nuestro coordinador local, Pedro Hernández, asistió a la concentración convocada frente al Ayuntamiento por la Asociación de Amigos del Pueblos Saharaui, que denunciaba de esta forma ante la ciudadanía aguileña los crímenes cometidos por Marruecos contra la disidencia saharaui.
¡Sáhara libertad!