El 20 de enero de 2018, los socios de la Asociación Cultural “La Carrahila” (Abarán – Valle de Ricote) decidieron crear y poner en marcha la campaña ¡Salvemos el Cabecico de la Cobertera! con el propósito de SELLAR, para la conservación a largo plazo, el deteriorado yacimiento arqueológico que existe en su cima, declarado Bien de Interés Cultural con categoría de monumento el 28 de junio de 2017 (decreto 194/2017).

Uno de los logros de esta campaña ha sido conseguir que los ayuntamientos de Abarán y Blanca, quienes comparten este B.I.C., se involucrasen en el propósito lanzado por la asociación, tal como quedó patente en la reunión a tres bandas realizada el pasado 18 de junio; compromiso materializado públicamente el 19 de septiembre durante la celebración del V Juntamiento de “La Carrahila” (titulado “¡Salvemos el Cabecico de la Cobertera!”), en el que estuvieron presentes los máximos regidores de Abarán y Blanca y en el que se escenificó la preocupación de los vecinos por la mediocre situación del yacimiento arqueológico.

El yacimiento arqueológico del Cabezo de la Cobertera fue interpretado como un granero fortificado (siglos XII y XIII) de tipología beréber ("agadir") cuando fue excavado sistemáticamente por el equipo de arqueólogos franco-belga formado por Johnny De Meulemmeester, François Amigues y André Matthys en los años 1988, 1989 y 1990.

Pese a su notable relevancia (único granero fortificado en la península, cuya planta de sus estructuras está bien definida), se encuentra en una situación de acusado deterioro.

La causa es llevar 30 años a la intemperie y sujeto a los actos vandálicos, no habiéndose realizado ninguna intervención de conservación.

La relajación administrativa ha permitido la pérdida de altura de las estructuras del yacimiento, pasando los alzados de 1 metro a escasos 20 centímetros de altura.

De seguir en este lamentable estado de abandono, el fuerte viento, las lluvias torrenciales y la malicia mano del hombre acabarán por hacer desaparecer este Bien de Interés Cultural.

A ello contribuye la endeblez de las estructuras, compuestas esencialmente por mamposterías de yeso y piedras y de tapiales de tierra.

La propuesta de la Asociación Cultural “La Carrahila” es la cubrición del yacimiento con geotextil y tierra (sellado) como única forma de garantizar su permanencia a largo plazo.

La actuación sobre este yacimiento arqueológico tiene que considerarse de urgencia, tal como pudieron manifestar los técnicos del Servicio de Patrimonio Histórico de la CARM, órgano competente, quienes observaron in situ el mediocre estado de conservación en una visita que realizaron con los socios de “La Carrahila” el 13 de abril del año pasado.

El compromiso de los ayuntamientos de Abarán y Blanca ha sido la de concurrir a las dos subvenciones que la Consejería de Turismo y Cultura ha lanzado en los últimos meses (ordenes de 6 de junio de 2018 y 5 de febrero de 2019), presentando el proyecto de SELLADO del B.I.C. del Cabezo de la Cobertera en ambas ocasiones. El resultado de la primera fue nulo.

Esperemos que la administración regional resuelva satisfactoriamente a esta noble causa en la segunda ocasión. 30 años sin medidas de conservación para un yacimiento arqueológico tan singular son muchos años. La solución de conservar para siempre el yacimiento arqueológico del Cabezo de la Cobertera está en manos de la Consejería de Turismo y Cultura.

Los ayuntamientos de Abarán y Blanca no pueden asumir, económicamente hablando, una responsabilidad que es de la administración regional al tratarse de un B.I.C.

Desde la Asociación Cultural “La Carrahila” os animamos a que actúen de oficio o concedan la subvención para evitar la desaparición de este Bien de Interés Cultural, cuya cuantía económica de intervención es más que ridícula.